Felipe Calderón había perdido su ventaja ayer. (Foto: EFE) |
Andrés Manuel López Obrador aún tiene posibilidades de ser el ganador. (Foto: EFE) |
CIUDAD DE MÉXICO.- El candidato presidencial oficialista Felipe Calderón, logró una ventaja irremontable sobre el izquierdista Manuel López Obrador, según los últimos datos aportados por el recuento final de los votos de los comicios del domingo.
Con el 99,99 por ciento de los votos computados, Calderón tenía el 35,38% de los sufragios, contra el 35,31% de López Obrador, marcando así una diferencia de 11 mil 691 sufragios, que representan una diferencia de 0,7 puntos.
De un total de 41 millones 753 mil 293 votos, 14 millones 754 mil 778 eran para Calderón y 14 millones 743 mil 87 para López Obrador.
Cientos de simpatizantes de Calderón se reunieron en la explanada de la sede de su Partido Acción Nacional, reaccionando con júbilo ante las noticias, mientras que López Obrador había abandonado hacía horas sus cuarteles de campaña, para esperar los resultados de los comicios en su casa, donde tiene programada una conferencia de prensa por la mañana.
El PAN, "está arriba en la elección para la Presidencia de la República", dijo un sonriente Calderón, en medio de aplausos y silbidos de sus simpatizantes.
Al darle las gracias a sus simpatizantes, Calderón también se dirigió a los millones que no votaron por él, pidiéndoles que "me den la oportunidad de ganarse su confianza".
Refiriéndose a la elección del domingo, las que calificó como "la más democrática y la más limpia en la historia de México", Calderón le pidió a su rival y a todos los mexicanos a eliminar las fuertes diferencias que surgieron durante la larga campaña, tratando de no centrarse en sus diferencias, sino en sus similitudes.
"A partir de hoy, hagamos que México inicie una nueva etapa de paz, de conciliación", dijo.
Como sea, decidió no proclamarse ganador en los comicios, dejándole la última palabra al Instituto Federal Electoral (IFE), el cual había expresado que no anunciará al nuevo Presidente de México en tanto no sea vuelto a revisar el total de actas de los totales de voto por distrito, vertidos en los comicios del domingo.
Esta fue la primera vez desde que se inició el lento recuento que Calderón tuvo la ventaja. En los conteos preliminares había mantenido una ventaja de uno por ciento y no dejó de insistir en que tenía la victoria, en marcado contraste con la mesura mostrada la madrugada del jueves.
Sin embargo, advirtió a sus simpatizantes que "vamos a defender los votos y les pido que estén atentos, porque vamos a requerir de cada uno de ustedes para que esos votos... no sean tirados a la basura, no se cancelen".
Todos ganan
Ambas campañas insistieron en que habían ganado la contienda, pero le pidieron a sus simpatizantes que no optaran por la violencia si el resultado final del recuento los inconformaba.
En una entrevista el miércoles con la AP, Calderón dijo que "la premisa es construir un gobierno de coalición... si para ello es necesario que integre en mi gabinete a miembros de otros partidos lo voy a hacer" sean del PRD o del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El conteo de cada acta comenzó a las ocho de la mañana (07:00 en Chile) del miércoles y no tiene un plazo específico para terminar. En el 2000, cuando Vicente Fox ganó, el recuento duró dos días.
Los equipos de campaña de Calderón y López Obrador se acusaron mutuamente de tratar de manipular las cosas para favorecer a su candidato, mientras que las autoridades electorales les pedían que se abstuvieran de clamar victoria en tanto se terminaba el recuento.
Funcionarios en los 300 distritos electorales de todo el país estaban sumando los resultados contemplados en las actas entregadas en cada una de esas demarcaciones, comparándolas con el número de votos vertidos en cada urna a pedido de los representantes de los partidos políticos, cuando sospechaban de alguna manipulación en los mismos.
López Obrador, ex alcalde de la ciudad de México, había logrado tener una ventaja de poco más de dos puntos porcentuales hacia la tarde del miércoles.
Sin embargo, funcionarios del PAN dijeron que esa ventaja se debía a que se habían contado en primera instancia los votos en las regiones donde él tenía la ventaja y que la tendencia cambiaría.
Asimismo, acusaron al PRD de tratar de detener el recuento en los estados donde Calderón tenía la ventaja, para dar la impresión de que López Obrador tenía la ventaja.
En ese respecto, Calderón dijo ante sus simpatizantes que "me apena que hayamos tenido que esperar tanto tiempo, pero por algunas estrategias que ya no voy a repetir... buscaron que los votos en las casillas en donde ganamos no fueran computados o se computaran lentamente".
