MIAMI.- Una mujer cubana que viajaba en un barco con otros treinta inmigrantes y tres presuntos traficantes de personas murió hoy después de que la Guardia Costera de EE.UU. interceptara la nave en los Cayos de la Florida.
El portavoz de la Guardia Costera James Judge confirmó a Efe la muerte de la mujer, pero precisó que no se debió a los disparos que los guardacostas hicieron al motor de la embarcación para inutilizarla.
Según un comunicado de la Guardia Costera, "ninguno de los inmigrantes resultó herido por los disparos".
La lancha de unos once metros de eslora con tres motores fuera borda donde viajaban los inmigrantes fue detectada a 39 millas (unos 63 kilómetros) al sur de Cayo Hueso.
Un barco guardacostas emprendió la persecución de la nave, que "navegaba a gran velocidad y sin luces de navegación".
Sus tripulantes hicieron caso omiso de las numerosas órdenes de detenerse que les hicieron los agentes e, incluso, trataron de embestir a gran velocidad en cinco ocasiones a la nave de la Guardia Costera.
Sólo una de las veces hizo contacto, precisó Judge.
Desde uno de los dos barcos de la Guardia Costera que se lanzaron en persecución de la lancha se hicieron dos disparos al motor para detener su marcha, lo que finalmente se produjo a cuatro millas (6,4 kilómetros) al sur de Boca Chica, en el sur de Florida.
Cuando los guardacostas abordaron la embarcación sobre las 07.00 horas (11.00 GMT) encontraron a tres inmigrantes que necesitan asistencia médica, por lo que se envió a un médico de la Marina que ordenó que una mujer con lesiones graves en la cara y en la cabeza fuera trasladada inmediatamente a un centro médico de emergencia en Cayo Hueso, agrega el comunicado.
La mujer, cuya identidad no se ha precisado, quedó inconsciente durante el traslado y fue declarada muerta a su llegada al centro médico, a las 08.34 horas locales (12.34 GMT).
Se va a practicar una autopsia al cadáver.
Además, una mujer embarazada fue llevada también a territorio continental de Estados Unidos para comprobar si el feto sufrió daños.
Otros tres hombres ocupantes de la embarcación que sufrieron heridas menores fueron atendidos a bordo del barco patrulla "Decisive", del servicio de Guardacostas, al que fueron trasladados todos los ocupantes, salvo las dos mujeres.
En Estados Unidos rige para los cubanos que llegan al país sin papeles la llamada ley de "pies secos y pies mojados".
"Pies secos" son aquellos cubanos que logran alcanzar territorio firme de EE.UU. y reciben de forma automática la autorización para permanecer en el país, mientras que los balseros interceptados en el mar ("pies mojados") son repatriados a Cuba.
"Este fue un viaje horrible para estos inmigrantes y ha desembocado en una tragedia. Manifestamos a la familia de la mujer fallecida nuestro mas sentido pésame y oramos por ellos", agregó el portavoz Judge.
El capitán Phil Heyl, comandante de la Guardia Costera en el sector de Cayo Hueso, señaló que "estos traficantes despiadados pusieron irresponsablemente a esta gente en peligro al navegar a gran velocidad con olas de mas de un metro, sin luces de navegación, sin atender las ordenes reiteradas de detenerse y sobrecargando la lancha".
"No había forma de que esa gente se sostuviera ante el impacto del bote contra las olas", agregó.
