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QUITO.- El volcán Tungurahua cambió "drásticamente" su comportamiento, al lanzar al menos cuatro flujos de lava fuera del cráter y su actividad se sigue incrementando, informó el Instituto Geofísico.
El director nacional de la Defensa Civil, José Grijalva afirmó en canal 8 de televisión que 243 familias de las poblaciones más cercanas al volcán han salido de sus localidades y algunos hombres y jóvenes se han quedado para resguardar sus bienes de posibles robos.
Desde las 17:50 de la tarde de ayer el volcán mostró un cambio de una "actividad de características de intensidad media a baja a una intensidad fuerte, mayor", señaló Hugo Yepes, director del Geofísico.
En una rueda de prensa explicó que desde "la tarde de hoy esta actividad ahora se caracteriza por un gran flujo de material magmático nuevo, de alturas de por lo menos 500 metros por sobre el cráter, con una salida sostenida del líquido magmático" que tendría una temperatura de entre 800 y 1.000 grados centígrados.
Dijo que según los reportes recibidos de la población de la zona, la gente escuchó "un cañonazo doble, muy fuerte, que abrió el sistema" interno de conducción de magma hacia fuera del cráter y se puede percibir "una vibración constante de la tierra".
Yepes afirmó que existen reportes desde las comunidades que se asientan en lugares cercanos, de caída de ceniza cuya consistencia tiene alrededor de un centímetro en Pillate y se espera una potencial caída de ese material bastante más importante hacia el lado occidental.
Refirió que el viento estaría llevando la ceniza desde 100 hasta 120 kilómetros al occidente de la zona andina y advirtió que eso podría dificultar las operaciones aéreas.
Indicó que, según los últimos reportes, la actividad "sigue subiendo", por lo que hizo un llamado a las autoridades a que tomen las decisiones pertinentes. Pidió a la población estar atenta, con "mucha cautela" ante el futuro del desarrollo de la actividad "ante la posibilidad cierta de mayor número de flujos magmáticos".
El Instituto Geofísico había informado que desde mayo, el Tungurahua, de 5.023 metros de altura sobre el nivel del mar y ubicado 135 kilómetros al sureste de Quito, registra el episodio "más energético desde 1999" cuando entró en un proceso eruptivo luego de 100 años de permanecer inactivo.
En la zona rige un decreto de emergencia desde mayo. Las poblaciones más cercanas mantienen la alerta naranja y Baños, una zona turística, sigue con la alerta amarilla decretada.
En Ecuador existen 30 volcanes potencialmente activos, concentrados en los Andes.
