CHICAGO.- El Concejo Municipal de Chicago, que en los últimos meses aprobó ordenanzas que prohíben desde fumar en lugares públicos a la venta de paté de ganso, ahora se encamina a regular el tipo de aceite que pueden utilizar los restaurantes.
En la polémica suscitada por esta última restricción potencial ha terciado el alcalde, Richard M. Daley.
"¡Es que ahora vamos a opinar sobre el menú de los restaurantes!", dijo jocosamente el edil, para quien una ciudad como Chicago, conocida en el mundo por su variedad de comidas étnicas, corre el riesgo de quedar reducida a "una dieta de zanahorias".
"No creo que el gobierno tenga que interferir, sino dejar que el consumidor educado demande lo que crea necesario y que los restaurantes respondan", opinó.
Sin embargo, en mayo pasado el Concejo Municipal prohibió la venta de paté de ganso o foei-gras por considerar que tiene efectos nocivos para la salud.
El concejal Edward M. Burke, del Distrito 14 y con 37 años en el cargo, se toma muy en serio su iniciativa de convertir a Chicago en la primera gran ciudad de Estados Unidos que prohíbe el uso de aceites artificiales transgénicos o hidrogenados en restaurantes.
"Tenemos la oportunidad de dar un paso valiente para proteger la salud de los ciudadanos", dijo el concejal, quien ha propuesto convocar a los ejecutivos de las grandes cadenas de comida rápida, como McDonald's, para que expliquen su insistencia en utilizar aceites que producen obesidad, colesterol y enfermedades cardíacas.
"¿Por qué, a pesar de todas las evidencias científicas, hay empresas que continúan preparando los alimentos que venden de una forma que es claramente perjudicial para la salud?", planteó Burke en una audiencia pública sobre el asunto.
Sustancia peligrosa
Según información de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, divulgada en la audiencia, unas 50.000 personas mueren prematuramente cada año debido al consumo de aceites transgénicos usados por restaurantes para cocinar o conservar alimentos envasados.
Otro concejal de Chicago, Eugene Schulter, del Distrito 47, anunció que la convocatoria a los ejecutivos de las cadenas será inmediata. "Si no hacemos algo, esto puede ser una pandemia", dijo Schulter, al referirse al problema de la obesidad que afecta a grandes y chicos.
Mientras, un portavoz de McDonald's dijo que la empresa, que tiene su sede central en el suburbio de Oak Brook, estaba "a la espera de la invitación". En tanto, en la red de cafeterías Starbucks, que también fue mencionada en la audiencia, un representante adelantó que "por el momento no está previsto que nuestro director ejecutivo comparezca".
El primer borrador de la ordenanza proponía que la prohibición se aplicara en todos los restaurantes de la ciudad, pero, tras las primeras reacciones adversas, como la de la Asociación de Restaurantes de Illinois, estado cuya mayor ciudad es Chicago, ha sido enmendado para excluir a los establecimientos pequeños.
De ser aprobada, la ordenanza regiría solamente para aquellos establecimientos con ingresos superiores a 20 millones de dólares anuales, dejando de lado las taquerías, restaurantes familiares y conocidos puestos de venta de "hot dogs" y "gyros" griegos.
Carolina del Norte es el único estado del país que aprobó una ley sobre los aceites transgénicos, que exige que en las escuelas públicas no se ofrezcan alimentos con esos ingredientes.
En la ciudad de Nueva York, el director de Salud sugirió un programa voluntario donde se pide a los restaurantes que reduzcan el uso de tales aceites, mientras que una pequeña localidad de California, llamada Tiburón, se declaró la primera de Estados Unidos en prohibir los transgénicos en sus 18 restaurantes.