LOS ANGELES.- Un nuevo incendio se desató en el sur de California, cerca de San Diego, donde se han quemado cerca de 3.000 hectáreas, y ha obligado a la evacuación de 150 hogares, indicó este lunes un informe de las autoridades locales.
El último fuego se produjo el domingo en el Bosque Nacional de Cleveland, una zona montañosa y salvaje ubicada entre Los Angeles y San Diego, 200 km al sur de la megalópolis californiana.
Unas 150 casas tuvieron que ser evacuadas, según precisó una portavoz de los bomberos, Roxanne Provaznik.
Por ahora se desconocen los motivos del incendio pero Los Angeles y su área de influencia viven una época en la que la temperatura promedio es de 40 grados.
Hasta el momento han resultado heridos dos bomberos y no se ha registrado ningún daño material. El departamento de bomberos estadounidense estima que el siniestro pudo ser originado por una fogata en un campamento armado por inmigrantes indocumentados.
El calor y el viento han dificultado las labores de unos 500 bomberos que se encuentran en el lugar.
El estado de California es presa de una ola de calor sin precedentes desde el sábado y las temperaturas han sobrepasado los 40 grados Celsius todos los días en varias partes de la región.
La semana pasada miles de bomberos lograron contener después de siete días dos colosales incendios que arrasaron más de 330 km2 en una zona desértica del sur de California y parte de un bosque protegido, con saldo de un muerto.
Además al menos 17 personas resultaron heridas levemente, en su mayoría bomberos y se quemaron cientos de viviendas, garajes y depósitos.
El oeste de Estados Unidos es cada año escenario de fuertes incendios durante el verano boreal debido a las altas temperaturas en una geografía desértica, de clima seco y ventoso.
Fue precisamente en esta zona donde en 2003, en los poblados que rodean el lago Big Bear, se desató una ola de incendios que mató a 22 personas, destruyó 3.000 viviendas y quemó unos 3.000 km2.
