QUITO.- Ecuador endureció las normas contra el consumo de tabaco en lugares públicos, con la prohibición de fumar en sitios cerrados y la aplicación de multas a quienes contravengan la norma y a los productores que no adviertan sobre los riesgos del cigarrillo en las cajetillas.
El ministro de Salud, Guillermo Wagner, señaló el jueves que mediante una reforma a la ley de consumidor aprobada por el Congreso, se prohíbe el cigarrillo en oficinas, teatros, consultorios médicos y sitios cerrados.
La prohibición también se extiende a las instituciones educativas, religiosas y de transporte aéreo nacional, así como al interior de vehículos de transporte público.
Asimismo, obliga a restaurantes, hoteles y terminales de transporte a asignar lugares para fumadores.
Están previstas además multas de 50 dólares para quienes fumen en sitios públicos y de hasta 3.200 dólares para los productores que no adviertan sobre los riesgos del cigarrillo en las cajetillas.
"El gobierno espera, a través de esta ley, que el hábito de fumar deje de afectar no solamente a las personas que lo practican, sino a los fumadores pasivos", indicó el ministro.
Wagner explicó que la norma excluyó de restricciones a lugares abiertos o con afluencia de menores, como centros comerciales y parques, pero se mostró partidario de aplicar medidas correctivas en el futuro.
"En los lugares abiertos hay menos peligro que en los cerrados como centros comerciales, pero soy partidario de que se restrinja el uso del tabaco", aseguró Wagner.
