CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI pidió a los cristianos y otros grupos que actúen en contra de la creciente guerra en Medio Oriente, diciendo que nada bueno proviene de esos conflictos, ni siquiera para los ganadores.
El Pontífice continuó con su campaña por un alto a los combates entre Israel y las guerrillas del Hezbollá en Líbano, durante una entrevista con medios alemanes que será transmitida en ese país el 13 de agosto.
El Vaticano dio a conocer anticipadamente la respuesta del Papa a una de las preguntas, concretamente sobre la situación en el Medio Oriente.
"Naturalmente, la Santa Sede no quiere tener ningún poder político", dijo Benedicto XVI durante la entrevista realizada esta mañana en su residencia de descanso en Castel Gandolfo, un poblado en las afueras de Roma.
"Pero queremos pedirle a los cristianos y a todos los que se sientan en alguna forma tocados por las palabras de la Santa Sede, de forma que se movilicen todas las fuerzas que reconocen que la guerra es la peor solución para todos", dijo el Pontífice.
La guerra "no trae nada bueno para nadie, ni siquiera para los aparentes ganadores. Sabemos eso muy bien en Europa, luego de dos guerras mundiales", dijo Benedicto XVI.
"Lo que todo mundo necesita es la paz", dijo el Papa. "Hay fuerzas morales que están listas para entender que la única solución es que debemos vivir juntos. Esas son las fuerzas que queremos movilizar, los políticos deben de encontrar el camino para que esto pase tan rápido como sea posible, y sobre todo, de una manera duradera", dijo el Pontífice.
La Santa Sede también dijo que el "diálogo paciente en base a la disposición a coexistir, lado a lado" era la única manera de "garantizar una solución a la crisis que mantiene a todo el mundo ansioso y amenaza su estabilidad".
Desde el inicio de los combates a mediados de julio, Benedicto XVI ha hecho reiterados llamados a ponerle fin a las hostilidades.