JERUSALEN.- Luego de aprobar una expansión en su ofensiva terrestre en Líbano, Israel decidió congelar el plan por dos o tres días para darle oportunidad a los esfuerzos internacionales de cese al fuego, informaron altas autoridades gubernamentales el jueves.
En tanto, el ministro de finanzas de Israel, Avraham Hirchson, estimó en 1.600 millones de dólares el costo que la ofensiva en Líbano ha significado para su país hasta ahora.
La posibilidad de un pronta resolución de cese al fuego por parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas es incierta, mientras dos miembros permanentes, Estados Unidos y Francia, mantienen posiciones divididas sobre el tema más álgido, el retiro de Israel de Líbano.
El Primer Ministro de Israel, Ehud Olmert, está listo para postergar hasta el fin de semana la expansión ofensiva, aseguró una fuente gubernamental de manera anónima al no estar autorizada para conversar con la prensa.
Sin embargo, la ofensiva podría adelantarse si Hezbollá lanzara un gran ataque contra Israel, agregó el informante.
El ministro Rafi Eitan confirmó la decisión de su gobierno de esperar. "Hay consideraciones diplomáticas", declaró a Radio Israel. "Todavía hay una posibilidad de que una fuerza internacional llegue a la zona. No tenemos interés en ocupar el sur de Líbano. Tenemos interés en que haya paz en nuestras fronteras".
Hassan Nasrallah, líder de la guerrilla Hezbollá, ha amenazado con nuevos lanzamientos de cohetes, y el miércoles en la noche pidió a los residente árabes del puerto israelí Haifi abandonar la ciudad y buscar refugios más seguros.
El gabinete de seguridad israelí dispuso el miércoles ampliar su ofensiva terrestre en el Líbano a fin de asestar más golpes a Hezbollá y lograr victorias rápidas antes de que sea decretada una tregua.
Desde el inicio de los combates el 12 de julio, 711 personas han muerto en Líbano, en tanto Israel ha sufrido 118 bajas.