MOSCU.- Los investigadores hallaron entre los restos del fuselaje las cajas negras del avión ruso Tupolev-154, que ayer se estrelló en territorio ucraniano con 170 personas a bordo.
El avión, que realizaba el trayecto entre el complejo turístico ruso de Anapa (Mar Negro) y San Petersburgo, se estrelló a 45 kilómetros de la localidad ucraniana de Donetsk.
La mayor parte de los fallecidos eran rusos, aunque la agencia Ria Novosti confirmó que cinco eran turistas extranjeros. Sus nacionalidades son francesa, alemana, finlandesa y holandesa.
El mal tiempo o un rayo se perfilan como causas del siniestro, aunque habrá que esperar al análisis de las cajas negras para conocer los resultados definitivos.
El atentado terrorista fue descartado como causa del accidente, según las autoridades rusas.