NUEVA YORK.- Autoridades estadounidenses informaron que el controlador aéreo que se encontraba trabajando la mañana en que el avión de Comair se estrelló en la localidad de Lexington, Kentucky, causando la muerte de 49 personas, autorizó el despegue del reactor e inmediatamente después se dedicó a realizar tareas administrativas, momento en el que el avión tomó la pista equivocada con nefastas consecuencias.
La responsabilidad no sólo recae en el controlador aéreo que estaba en la torre de control en aquel momento, sino también apunta a la propia Administración Federal de Aviación por autorizar la presencia de un solo hombre en la torre del aeropuerto de Lexington.
Un pequeño avión CRJ-100 que realizaba un trayecto regional hasta la ciudad de Atlanta se estrelló aproximadamente a un kilómetro del final de la pista de despegue.
Las primeras investigaciones hablaron de un error del piloto de la nave.
En rigor, el Comair 5191 tomó una pista de menor longitud a la requerida por este tipo de aeronaves para despegar, y no pudo lograr la velocidad necesaria para conseguir elevarse.
El accidente ocasionó el fallecimiento de 49 personas y dejó un herido en estado grave, informó Europa press.