ROMA.- El Papa Juan Pablo II era espiado por informantes del Vaticano que trabajaban para los servicios secretos polacos durante la era comunista, dijo el martes un cardenal polaco.
El cardenal Joseph Glemp, arzobispo de Varsovia, dijo a la agencia de noticias italiana ANSA que Juan Pablo II fue blanco de espionaje entre su elección en 1978 y la caída del Muro de Berlín en 1989.
Juan Pablo era "espiado, ¡y cómo!", citó ANSA a Glemp en Asís, adonde asistía a una conferencia religiosa.
Glemp repitió acusaciones que han salido a la luz en Polonia desde la muerte de Juan Pablo el año pasado. El cardenal es una de las autoridades de la iglesia polaca de mayor jerarquía en hablar sobre el tema abiertamente.
Interés de Moscú
"Había espías en el Vaticano. Moscú tenía un gran interés en saber qué estaba ocurriendo en Roma con un Papa polaco en el cargo", dijo Glemp.
Juan Pablo II fue el primer Papa de un país comunista. Apoyó al movimiento de sindicatos Solidaridad, que desafió al comunismo en Polonia en los años previos a la caída del bloque soviético.
A principios de este año un informe parlamentario italiano dijo que líderes soviéticos planificaron el intento de asesinato fallido contra Juan Pablo II en 1981 porque temían que desestabilizara el bloque del este.
El año pasado el Instituto Nacional de la Memoria Polaca, que supervisa la investigación de los archivos de la era comunista, dio a conocer documentos que muestran evidencia de que el sacerdote Konrad Hejmo había sido un informante para los servicios de seguridad polacos.
Durante muchos años Hejmo estuvo a cargo de los peregrinos polacos que visitaban Roma y se mantuvo cercano al entorno papal.
Hejmo negó ser un espía, diciendo haber sido "ingenuo" por haber compartido información con un polaco que vivía en Alemania y que más tarde se descubrió era un espía.
Pero Glemp dijo estar convencido de que Hejmo fue un espía.
"Ciertamente, él fue un espía. Los documentos y papeles que se hicieron públicos el año pasado lo prueban. Personalmente, estoy convencido de que el sacerdote Hejmo hizo acusaciones y escribió informes", dijo Glemp.
Espía por 25 años
Hace dos meses los polacos se sorprendieron al conocer que un importante cura católico en Polonia, el padre Michal Czajkowski, admitió haber espiado a disidentes y a clérigos para los servicios secretos comunistas en Polonia durante cerca de 25 años.
El Instituto Nacional de la Memoria sostiene que hasta un 10 por ciento de los sacerdotes en Polonia puede haber trabajado con los servicios secretos, lo supieran o no.