LA PAZ.- El Presidente Evo Morales dijo que el paro de cuatro regiones contra el supuesto intento de su gobierno de instaurar un régimen "totalitario", previsto para el viernes, es producto del "odio y desprecio" a los indígenas.
"Siento que es el odio y el desprecio al movimiento indígena originario. Hemos recibido muchos insultos, provocaciones y de paso quieren amedrentar al pueblo", declaró a los periodistas el jueves por la noche al abandonar su despacho.
Cuatro departamentos de los nueve que tiene Bolivia llamaron a una huelga en rechazo a la decisión del oficialismo de imponer su mayoría en la Asamblea Constituyente para aprobar una nueva constitución.
"Se abrió el diálogo y siento que está demás el paro", señaló Morales al referirse a las reuniones que inició el jueves la directiva de la Asamblea para buscar un acuerdo con los opositores tras la sesión de la víspera cuando los oficialistas volvieron a imponer su mayoría sin escuchar a la oposición.
Morales dijo que no sacará a los militares para controlar el orden y desmintió que las fuerzas armadas hayan sido declaradas "en emergencia" , pero señaló que "la policía hará lo que corresponde para garantizar la libre circulación" en las regiones donde se realice la protesta.
"Será un paro obligado, forzado, intimidado. No puede ser bajo amedrentamiento", señaló, a tiempo de reconocer que la protesta es un derecho "constitucional".
La crisis política detonó la semana pasada, cuando el Movimiento al Socialismo de Morales se impuso en la Asamblea Constituyente, que sesiona en la ciudad sureña de Sucre, y logró aprobar en primera instancia un reglamento de debate en el que se declara a esa institución "originaria", es decir, plenipotenciaria.
También establece que los artículos de la nueva constitución, que debe emerger del foro hasta agosto de 2007, podrán ser aprobados con los votos del 50% más uno de los 255 representantes, mayoría con la que cuenta el MAS, y no con los dos tercios que establece la ley de convocatoria a la Asamblea, número al que no alcanza el oficialismo.
El principal partido de oposición Podemos y dirigentes cívicos de las regiones en pie de huelga han manifestado el temor de que el oficialismo busque que la Asamblea le confiera poderes al presidente Morales para gobernar sin el Congreso y de forma indefinida.
El ministro de Defensa, Walker San Miguel dijo a la prensa que algunas agrupaciones que promueven el paro son "sediciosas" y que buscarían la separación del país, pero el presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Germán Antelo, indicó a la prensa que es el gobierno el que promueve la división al no respetar las leyes y privilegiar a algunos grupos sociales, étnicos y regionales en detrimento de otros.
El movimiento convocado por Santa Cruz, Beni y Pando en el oriente y Tarija en el sur, comprende a prefectos, organizaciones cívicas, legisladores, alcaldes y asambleístas de esos departamentos. Estos también han rechazado supuestos intentos del gobierno de establecer un régimen socialista.