EFE |
KABUL.- El peor atentado suicida desde la caída del régimen radical islámico talibán en Afganistán hace casi cinco años causó hoy en Kabul la muerte de 14 personas, entre ellas dos soldados estadounidenses.
Las tropas de la coalición, lideradas por Estados Unidos, comunicaron que el ataque con auto bomba en el centro de Kabul, cerca de la embajada de Estados Unidos, tenía como objetivo un convoy militar norteamericano. Además de los dos soldados muertos, otros dos resultaron heridos.
Ali Shah Paktiawal, jefe de la unidad criminal de la policía de Kabul, confirmó que además del suicida, murieron 11 afganos y resultaron heridos otros 29. Los talibán se hicieron responsables del atentado.
Según datos del Ministerio de Defensa alemán, el ataque costó la vida al menos a 15 personas. La tropa de la ONU ISAF aseguró que ninguno de sus efectivos se vio afectado por la explosión, que según un portavoz de las fuerzas estadounidenses en Kabul destrozó uno de sus vehículos.
El atentado se produjo en una concurrida plaza de la capital, cerca de la embajada estadounidense, a unos 150 metros del cuartel general de la tropa internacional ISAF.
La plaza lleva el nombre de Ajmed Shah Massoud, un antiguo combatiente de la Alianza del Norte, asesinado el 9 de septiembre de 2001 por los talibán. El sábado y el domingo se conmemora en Afganistán la muerte de Massoud.
La Alianza del Norte derrocó junto a las tropas de la coalición lideradas por Estados Unidos al régimen talibán, a finales de 2001.
Aumenta la violencia
Mientras tanto, las fuerzas de la OTAN han matado a 24 insurgentes talibán y detenido a otros cuatro durante enfrentamientos con los rebeldes en el distrito de Panywayee, en la sureña provincia de Kandahar, informó hoy un portavoz de la organización.
"Como los combatientes talibán se agrupan en zonas del distrito de Panywayee, cuando las tropas de la OTAN los ven, van a por ellos", dijo el comandante Quentin Innis, uno de los portavoces de las tropas de la OTAN en Afganistán (ISAF).
Según datos de la OTAN, más de 300 rebeldes talibán han perdido la vida desde el lanzamiento de la operación Medusa el pasado sábado en los distritos de Panywayee y Zhari, en la sureña provincia afgana de Kandahar.
Entre tanto, el comandante en jefe de las tropas británicas en Afganistán, Ed Butler, dijo a British ITV News que el sur de Afganistán es "feroz" y sus tropas han sido atacadas una docena de veces.
"La intensidad y ferocidad diaria de los enfrentamientos es mucho más elevada que en Irak", dijo Butler, en declaraciones pronunciadas en el marco de la reunión estratégica de altos mandos de la OTAN en Varsovia y recogidas hoy por la prensa británica.
No obstante, señaló que la moral de los soldados sigue siendo alta.
La situación de seguridad en Afganistán es peor que nunca desde la caída del régimen talibán. En los fuertes combates registrados en el sur del país en las últimas semanas, murieron cientos de rebeldes y un gran número de soldados extranjeros. En la capital, cada vez son más numerosos los atentados.