PEKÍN.- Mil aves domésticas murieron en un nuevo brote del virus H5N1 de la gripe aviar en la región autónoma de Ningxia, en el norte de China, informó hoy el Ministerio de Agricultura chino.
Casi 73.000 aves fueron sacrificadas para evitar la extensión del virus, declarado en el término municipal de Yinchuan, la capital regional, según un comunicado del Ministerio.
Se trata del cuadragésimo caso registrado en los últimos doce meses y el segundo brote en animales en menos de una semana, después de que el pasado fin de semana se informara de otro en la vecina región de Mongolia Interior, que mató a 985 pollos.
En China, la gripe aviar en animales obligó en los últimos dos años al sacrificio de más de 20 millones de aves y la vacunación de 14.000 millones (prácticamente la población total de aves domésticas en el país).
Respecto a los casos en humanos, China ha registrado 21, de los que 14 fueron mortales (el primero ocurrió en 2003, aunque el caso no se conoció hasta este año).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) criticó a finales del pasado año a China por no compartir muestras de los virus recogidas en el país, aunque en los últimos meses el organismo internacional ha reconocido que Pekín se muestra más cooperativa.
En los últimos tres años, la gripe aviar ha afectado a 252 personas, de las que 148 fallecieron, en China, Indonesia, Vietnam, Tailandia, Azerbaiyán, Camboya, Yibuti, Egipto, Irak y Turquía.