PEKÍN.- Científicos hongkoneses y estadounidenses descubrieron de forma accidental un gel capaz de frenar hemorragias en menos de 15 segundos que podría revolucionar las operaciones quirúrgicas, publicó hoy el diario "South China Morning Post".
Los expertos, pertenecientes a la Universidad de Hong Kong y al Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), dieron con la fórmula del gel mientras trabajaban en un proyecto de regeneración de células cerebrales.
El hallazgo fue tildado por la revista científica internacional "Nanomedicine", que publicó los resultados de la investigación, como pionero en la utilización de un producto biodegradable para cortar una hemorragia en roedores, técnica que se consigue en tan sólo unos segundos.
Su aplicación en humanos podría reducir drásticamente el tiempo que los cirujanos emplean en controlar las hemorragias en las operaciones quirúrgicas, que es casi la mitad del empleado en la intervención.
A pesar de que los científicos desconocen aún el mecanismo exacto que frena la hemorragia, señalaron que el nuevo material contiene unos fragmentos de proteínas denominados péptidos que actúan sobre la herida como un gel protector a una nanoescala (una millonésima parte de un milímetro).
Una vez que consigue parar el flujo de sangre, el gel se descompone en moléculas que el organismo puede utilizar para reparar el tejido dañado. Por ahora, este novedoso producto se ha utilizado en heridas en el cerebro, hígado, piel y tejido de la médula espinal de ratas y hámsters, y su aplicación frenó las hemorragias casi instantáneamente en todos los casos.
"En una operación quirúrgica, los doctores tienen pocos métodos eficaces para frenar la hemorragia sin causar otros daños", señaló So Kwok-fai, jefe del departamento de anatomía de la Universidad de Hong Kong.
Actualmente, las herramientas más utilizadas para este fin son la presión con pinzas, esponjas y la aplicación de calor. Los investigadores consideran que las pruebas clínicas podrían comenzar dentro de unos cinco años, y que se necesitarán al menos diez antes de que el producto se utilice ampliamente en los hospitales.
Según el MIT, una operación de úlcera gástrica podría costar de sólo 200 a 300 dólares (159 a 239 euros) con el novedoso material.