BANGKOK.- El Gobierno provisional de Tailandia inició una ofensiva diplomática con la finalidad de mejorar la imagen del país en el exterior y justificar la asonada militar que depuso en septiembre al entonces primer ministro electo, Thaksin Shinawatra.
Con ese fin, el Primer Ministro interino, el general retirado Surayud Chulanont, se reunirá a lo largo de hoy con los embajadores y jefes de las misiones diplomáticas acreditadas en Tailandia.
Con la iniciativa el nuevo Gobierno intenta responder a las críticas y condenas hechas por la comunidad internacional a raíz del incruento golpe de Estado perpetrado el pasado 19 de septiembre por un grupo de militares liderados por el jefe del Ejército, general Sondhi Boonyaratglin.
A la sede del Gobierno han sido también invitados los jefes de las misiones diplomáticas de la Unión Europea (UE), incluido el embajador de España, Juan Manuel López Nadal.
La Unión Europea, Estados Unidos y otras naciones, así como los grupos internacionales comprometidos con la defensa de los derechos humanos, condenaron el golpe de Estado, e instaron a los líderes golpistas a restituir las libertades sin demora.
Tras la asonada, la junta militar golpista declaró la ley marcial, anuló la Constitución, prohibió las actividades políticas, incluidas las de los partidos legalmente constituidos, e impuso la censura a los medios de comunicación.
La jornada de reuniones entre el primer ministro Chulanont y los diplomáticos extranjeros tiene lugar después de que el pasado lunes el rey de Tailandia, Bhumibol Adulyadej, pidiera al nuevo Gobierno que repare "la reputación" del país.
En rueda de prensa, el ministro de Asuntos Exteriores, Nitya Pibulsongkran, señaló que su principal objetivo "será explicar a la comunidad internacional lo que ha ocurrido y a donde se dirige Tailandia".
El Consejo de Seguridad Nacional, denominación oficial de la junta militar que asumió el poder, nombró al general retirado Surayud Chulanont, Primer Ministro interino del nuevo Gobierno.
La junta militar afirmó tras tomar el poder, que el actual Gobierno conducirá al país hasta la celebración de las elecciones legislativas previstas para octubre de 2007.