LONDRES.- El príncipe Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, realizó ayer una visita sorpresiva de un día a las tropas británicas en la ciudad de Basora, en el sur de Irak, informó hoy un vocero real del Palacio de Buckingham, en Londres.
Felipe, de 84 años, pasó revista a soldados del Regimiento The Queen's Royal Hussar, que completaron sus operaciones militares de seis meses y medio en Irak.
Vestido en uniforme camuflado, el príncipe Felipe dijo que fue "un gran placer" verlos hacer "una tarea fantástica".
"Todos en Gran Bretaña han seguido con mucho detalle lo que ocurre en esta parte del mundo y sienten mucha simpatía por todos ustedes en peligro, que están tratando de hacer lo mejor para que la población local tenga una vida civilizada y tolerable", afirmó.
"Ustedes han hecho una labor fantástica y espero que regresen a casa sanos y salvos", agregó Felipe, tras su primera visita a Irak desde el comienzo de la invasión anglo-estadounidense en marzo de 2003.
El Regimiento de The Queen's Royal Hussar realiza patrullas contra el tráfico de armas en la frontera del sur iraquí.
Por su parte, la vocera real del Palacio de Buckingham, declaró que Felipe "quería visitar a las tropas y demostrarles su apoyo, alabando sus logros", y que ya está de regreso a Londres.