BEIJING.- Con estilo arquitectónico antiguo y un letrero a su entrada que avisa del estatus matriarcal, la municipalidad de Chongqing, en el centro de China, planea inaugurar en tres años la primera ciudad femenina del país, según recoge hoy el portal Chinanews.
La idea de una ciudad en exclusiva para mujeres se le ocurrió hace años a Li Jigang, director de la Oficina de Turismo del distrito de Shuangqiao, cuando trataba de conquistar a su hoy esposa, a la que prometió entonces obedecer durante toda la vida.
Ahora el proyecto, diseñado durante meses, ha sido aprobado por el gobierno de Chongqing, que emplazará la ciudad de las mujeres en un área de 2,3 kilómetros cuadrados alrededor del lago Longshui.
La entrada a este nuevo núcleo urbano estará presidida por un cartel que reza "Las mujeres siempre tienen razón y los hombres nunca deberían rechazar sus peticiones", desveló Li.
Una vez traspasado este umbral, los hombres tendrán que obedecer sin reparos a esposas, novias o madres, so pena de ser multados por la administración local, obviamente regida por ellas.
Li aseguró que la innovadora ciudad quiere reforzar ante la sociedad los derechos de las mujeres, que podrán acudir a sus calles para disfrutar, mientras que los hombres sólo podrán hacerlo cuando de satisfacer a sus parejas se trate.
La primera ciudad china originalmente concebida para el deleite femenino estará regida en exclusiva por mujeres, que podrán "discriminar" y "castigar" a los hombres cuando éstos no acaten sus dictados, adelantó Li.
Precisó además que se tratará de una sociedad matriarcal, donde las madres se responsabilizarán de la totalidad de los asuntos familiares, y junto a esposas y novias, tendrán la capacidad para otorgar o denegar permiso a los hombres si éstos desean ir de compras.
Chongqing, con 30 millones de habitantes, ha profesado siempre una especial devoción hacia sus mujeres, consideradas no sólo bellas y elegantes, sino capaces y tenaces por encima de los hombres.
Prueba de ello fue el despliegue de medios que agencias turísticas, salones de belleza y gimnasios realizaron el pasado verano durante el Mundial de Alemania 2006, con el único objetivo de agradar a las féminas mientras sus maridos seguían el campeonato.
La municipalidad llegó a contar aquellas semanas con una "Zona Cero de Fútbol", con restaurantes y negocios hosteleros en los que los televisores permanecieron estrictamente apagados.