KINSHASA, Congo.- El presidente Joseph Kabila advirtió que iba a reprimir cualquier "provocación" durante las elecciones históricas de Congo el domingo, afirmando que la situación en el país era precaria de cara a la votación.
"La situación es grave. Habrá una respuesta a cualquier provocación. Ya se prepararon todas las medidas", dijo Kabila en una entrevista en televisión que pareció ser una advertencia oculta a su rival, el ex caudillo guerrero Jean-Pierre Bemba.
Los partidarios de ambos candidatos han chocado varias veces desde la primera vuelta electoral, el 30 de julio. En agosto, sus ejércitos privados lucharon tres días en combates callejeros en la caótica capital, Kinshasa, en donde murieron al menos 30 personas.
Cuatro personas murieron el jueves cuando los soldados de Bemba rodearon a un aliado clave de Kabila, Francois Joseph Mobutu Nzanga, en el pueblo norteño de Gbadolite. Tropas de la ONU rescataron el viernes a Mobutu Nzanga, hijo del último dictador Mobutu Sese Seko, de una emisora de radio del pueblo.
Kabila se presentó en la primera vuelta como el "que lleva los huevos" o el pacifista que pondría fin a los sangrientos conflictos en la República Democrática del Congo. Pero en la entrevista adoptó una línea más dura.
"El presidente no es más quien lleva los huevos porque la situación es precaria. la situación es precaria porque ha habido incidentes. El presidente ya no lleva más los huevos, es el jefe de estado", agregó la noche del viernes.
La competencia presidencial, acompañada de elecciones provinciales, decidirá quién tendrá control del vasto país del centro de África, tierra de un tesoro de minerales pero convulsionada tras décadas de violencia y corrupción.