LONDRES.- El príncipe William de Inglaterra, segundo en la línea de sucesión a la Corona británica, recibió una dura reprimenda por haber perdido su pistola L86, durante los entrenamientos militares en la Academia de Sandhurst, en Inglaterra.
El príncipe de 24 años, al darse cuenta de la pérdida, le pidió prestada la bicicleta a un cadete y pasó dos horas buscando el arma.
Según consigna Ansa, las armas de los cadetes son guardadas bajo llave en la sala de municiones de la institución de Berkshire y por razones de seguridad deben pasar por estrictos controles antes de ser entregadas a los estudiantes.
Pero perder un arma, incluso si no está cargada, puede reducir las chances de que William reciba ahora la prestigiosa "Espada de Honor’’, el premio al mejor estudiante de Sandhurst.
"El arma del cadete Gales fue hallada por otro cadete, quien la devolvió después de varias horas’’, comentó un vocero militar.