CIUDAD DE PANAMA.- El jefe policial antidrogas de Panamá, quien murió mientras indagaba sobre los posibles lazos entre los cárteles y las fuerzas especiales contra el narcotráfico, fue envenenado como parte de un complot, dijeron los fiscales el jueves.
Franklin Brewster, un policía de alto rango, cayó enfermo y murió en julio días después de iniciar una investigación sobre la posible infiltración de las fuerzas antidrogas por parte del narcotráfico.
Un portavoz de la fiscalía pública de Panamá dijo que los asesinos recibieron 500,000 dólares por matar a Brewster y que tres de sus colegas estaban siendo investigados por homicidio.
"Brewster inició una investigación vinculando su división con una organización internacional de narcotráfico. Ese mismo día que Brewster entregó el informe quedó envenenado’’, dijo el portavoz.
Un periódico local dijo que ese grupo internacional era el violento cártel mexicano de los Arellano Félix, con sede en Tijuana, en el límite entre México con Estados Unidos, pero el portavoz declinó hacer referencias a esa información.
Sólo la selvática provincia de Darién separa Panamá de Colombia, el mayor productor mundial de cocaína, por lo que el primer país es una ruta clave para contrabandistas de drogas y armas, así como un centro de lavado de dinero.
El fiscal antidrogas de Panamá renunció días después de la muerte de Brewster tras no lograr poner freno al flujo de cocaína por el país, argumene hacer su trabajo adecuadamente.