CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI reiteró este viernes en su discurso en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma la importancia del diálogo entre religiones, añadiendo que sólo es constructivo si se evita cualquier "ambigüedad".
"No se puede prescindir de la relación con otras religiones, que se revela constructiva sólo si se evita cualquier ambigüedad que debilite el contenido de la fe", dijo el Papa durante su visita a la Pontificia Universidad Gregoriana, para inaugurar el año académico.
El Papa denunció además que la actual cultura "en muchas partes del mundo, tiende siempre más a negar cada señal de la presencia de Dios en la vida de la sociedad y del individuo, con medios que desorientan y ofuscan la consciencia del hombre".
Sin Dios, según Benedicto XVI, "no se puede responder a las preguntas fundamentales que agitan el corazón de los hombres", ni crear una sociedad "con los valores éticos necesarios para garantizar una convivencia digna".
"El destino del hombre sin su referencia a Dios no puede ser más que la desolación de la angustia, que conduce a la desesperación", agregó el Papa.
Al respecto, el Papa pidió a los profesores de la Universidad Gregoriana que se esfuercen en su deber de una "formación integral de los jóvenes".
Después, dirigiéndose a los estudiantes, les comentó que el estudio "requiere esfuerzo y abnegación" y forma a la persona "al sacrificio y al sentido del deber".
La Pontificia Universidad Gregoriana nació como heredera del Colegio Romano fundado por San Ignacio de Loyola en 1551, y cuenta con 3.000 estudiantes, procedentes de 130 países.
El ateneo romano ha visto entre sus estudiantes a varios Papas, como Pio XI, Pio XII, Pablo VI y Juan Pablo I y también Benedicto XVI, como él mismo recordó hoy, fue profesor de un curso sobre la Eucaristía durante el año académico 1972-1973.