LONDRES.- Tres personas han sido remitidas a una clínica especial para ser sometidas a pruebas radiológicas tras la muerte por envenenamiento radiactivo del ex espía ruso Alexander Litvinenko, informó hoy la Agencia de Protección de la Salud (HPA).
Litvinenko murió la semana pasada por una alta dosis de radiación emitida por polonio 210, una sustancia radiactiva de la que la policía británica encontró rastros en su casa, así como en un hotel y un restaurante de Londres que visitó el día en que cayó enfermo.
Fuentes de ese organismo explicaron que más de 450 personas han llamado a un número de teléfono de atención directa del Servicio Nacional de Sanidad (NHS) preocupadas ante la posibilidad de haberse contagiado tras la muerte de Litvinenko y que la HPA hará un seguimiento de dieciocho casos.
Tres personas relacionadas con alguno de esos dieciocho casos han sido enviadas, como medida de precaución, a una clínica especial para que se sometan a una evaluación radiológica y los resultados de las pruebas se conocerán aproximadamente.
Esas tres personas tenían alguna vinculación con el restaurante o el hotel visitados por el ex espía, según la cadena británica BBC.
El ministro británico del Interior, John Reid, hará una declaración ante el Parlamento a las 15:30 GMT de hoy en relación con el caso, que está siendo investigado por Scotland Yard.
Litvinenko, conocido por sus afiladas críticas al Presidente ruso, Vladimir Putin, falleció el pasado jueves como consecuencia de una gran dosis de una radiación emitida por la sustancia radiactiva polonio 210.
El pasado 1 de noviembre, cuando enfermó de forma repentina, Litvinenko se reunió en un hotel de Londres con dos compatriotas, uno de los cuales es un ex agente del KGB (antiguo servicio de espionaje soviético).
Ese mismo día, el ex espía se entrevistó con el profesor italiano Mario Scaramella -quien tiene buenos contactos en el mundo del espionaje- en un restaurante japonés en el centro de la capital británica.
Al parecer, Scaramella le facilitó nombres de las personas que podrían estar involucradas en el asesinato de la periodista rusa Anna Politkovskaya, también detractora del Kremlin, que estaba siendo investigado por Litvinenko.
Litvinenko, de 44 años, fue coronel del Servicio Federal de Seguridad (antiguo KGB, al que también perteneció Putin) y residía desde 2001 como refugiado en el Reino Unido, donde el Gobierno le había concedido la nacionalidad británica.
El antiguo agente secreto, que murió en el University College Hospital de Londres tras un rápido deterioro de su salud, acusó en una carta póstuma a Putin de estar implicado en el supuesto crimen.