BUENOS AIRES.- El Gobierno argentino comenzó hoy a investigar el ataque a balazos que dejó herido de gravedad a un custodio presidencial y enmarcó el hecho en una serie de amenazas contra el mandatario Néstor Kirchner, reveló el ministro del Interior, Aníbal Fernández.
"El gobierno está preocupado. Durante un buen tiempo se vienen recibiendo amenazas a la figura del Presidente", dijo Fernández a la capitalina Radio América.
El ataque ocurrió en la zona porteña de Versalles cuando el escolta, un cabo de la Policía Federal, se trasladaba solo en su automóvil en momentos en que fue baleado desde otro vehículo que se cruzó en su camino.
"No es la primera vez que el Gobierno recibe amenazas o agresiones", dijo Fernández en declaraciones publicadas en el sitio de internet de la agencia estatal Télam.
El jefe de la cartera política y de seguridad aseguró que la agresión que sufrió el lunes uno de los guardaespaldas presidenciales "nos obliga a prestarle atención".
"Cuando aparece un tema con estas características, donde la agresión a un custodio ha sido una cosa impensada y donde ha habido una cantidad de disparos muy importante, nos preocupa y por eso no lo callamos", acotó Fernández.
El custodio --que no fue identificado-- recibió cuatro impactos de bala y fue trasladado de urgencia a un hospital, adonde se encuentra en terapia intensiva.Los médicos todavía no han podido extraerle uno de los proyectiles, según una fuente del hospital.
Fernández explicó que las amenazas a Kirchner "no se habían hecho públicas antes porque no se quiere hacer un uso político" de los hechos.
También precisó que el policía herido de la custodia presidencial está asignado a la senadora y primera dama Cristina Fernández.