Yunus posa con la medalla y el diploma que le fue otorgado.
AFPOSLO.- El banquero de los pobres, Mohammed Yunus, recibió hoy en Oslo el Premio Nobel de la Paz 2006 junto al Banco Grameen, proponiendo una nueva teoría económica sobre el "negocio social" altruista y la creación de un "mercado de valores social".
El presidente del Comité Nobel, Ole Danboldt Mjos, entregó en el Ayuntamiento de Oslo sendas medallas de oro y diplomas al profesor de economía bengalí y a Taslima Begum, que acudió en representación del Banco Grameen.
Yunus dijo en su discurso de aceptación que las teorías modernas económicas se centran en la figura del empresario centrado en "conseguir los mayores beneficios", desprovisto de una dimensión humana y social.
El profesor criticó las carencias de los modelos de libre mercado de los países occidentales y expuso que Estados Unidos, "el país con el mercado más libre y rico", no "proporciona seguridad social a un quinto de su población".
Yunus dijo que "ampliando el concepto de empresario podemos cambiar la naturaleza del capitalismo radicalmente y resolver muchos problemas sociales y económicos".
El economista propuso la idea de un hombre de negocios motivado en "obtener el máximo de beneficios" y en "hacer el bien para las personas y el mundo".
Este último acicate daría lugar a su teoría económica del negocio social, según explicó.
"El negocio social será un nuevo tipo de empresa cuyo objeto es cambiar el mundo. Los accionistas obtendrían lo invertido pero no sacarían dividendos de la compañía", explicó Yunus, agregando que "los beneficios revertirían a la compañía para su expansión".
El laureado manifestó que el negocio social es una alternativa al "sueño socialista", y puede aplicarse en distintos sectores como la salud, las nuevas tecnologías, la educación o la energía.
El Banco Grameen, que fundó formalmente en el año 1983, es el mejor ejemplo de "negocio social".
La institución fue creada en respuesta a la situación de casi esclavitud de parte de la población campesina de Bangladesh.
"Me sorprendió descubrir en el pueblo de Jobra a mujeres tomando préstamos de menos de un dólar a condición de que el prestamista tuviera el derecho exclusivo de comprar todo lo que produjeran al precio que él decidiera", expresó Yunus.
"Eso, para mí, era una manera de conseguir mano de obra esclava", dijo.
Ese hecho generó el Banco Grameen o "Banco del pueblo", que hoy tiene casi 7 millones de prestatarios pobres, de los cuales el 97 por ciento son mujeres.
La institución ha proporcionado hasta hoy un total de 6.000 millones de dólares en préstamos, que pueden ser tan insignificantes como los 12 dólares concedidos a unos 85.000 mendigos.
Yunus subrayó que su teoría de negocio social sólo puede funcionar con la creación de un mercado de valores social "donde sólo coticen los valores sociales", que requiere la creación de nuevos instrumentos mercantiles.
El profesor dijo, igualmente, que apoya la "globalización", aunque advirtió que la misma debe tener reglas para proteger al débil y evitar que esa tendencia se convierta en un "imperialismo financiero".
Aparte, el ganador del Nobel dijo que la pobreza es una amenaza para la paz y una "ausencia de todo derecho humano", y señaló que la mitad de la población mundial vive con sólo dos dólares diarios.
Acusó a los dirigentes mundiales de gastar más en combatir el terrorismo que en intentar alcanzar los objetivos del Milenio de las Naciones Unidas, de reducir la pobreza a la mitad en 2015.
Los atentados del "11 de septiembre y la guerra de Irak han desbaratado la persecución del sueño" fijado en la ONU para 2000, "con la atención mundial puesta en la guerra contra el terror y no contra la pobreza", declaró y agregó que Estados Unidos ha gastado 530.000 millones de dólares hasta ahora en la guerra de Irak.
"Combatiendo la pobreza como causa del terrorismo, se conseguirá acabar con ese fenómeno y no con las armas", opinó.
La reina Sofía de España escuchó el discurso en la sala de invitados del Ayuntamiento de Oslo, sentada junto a una comitiva de nueve mujeres pobres prestatarias del Banco Grameen.
La ceremonia estuvo amenizada con varios bailes típicos de Bangladesh y música clásica.