LONDRES.- Rusia quiere enviar a sus propios investigadores a Gran Bretaña para indagar en el caso del envenenamiento del ex espía Alexander Litvinenko, aunque la fiscalía rusa todavía no ha fijado una fecha, informa hoy el "Independent on Sunday".
Rusia ha iniciado sus propias pesquisas, que se desarrollan de forma paralela a las investigaciones británicas. Los investigadores rusos quieren interrogar a dos amigos de Litvinenko en Gran Bretaña, informa el diario.
Se trata del multimillonario Boris Berezovski, quien ayudó económicamente a Litvinenko, y al disidente chechenio Ajmed Sakayev. Rusia exige al parecer la extradición de ambos. Según el "Guardian", Berezovski quiere cooperar con la policía rusa.
Entretanto, Scotland Yard confirmó que en dos policías británicos se han demostrado la presencia de la sustancia radiactiva polonio 210. La cantidad es pequeña por lo que no existe ningún peligro grave para la saludo, informa hoy el diario "The Observer".
