MONTREAL.- Una enorme plataforma de hielo se separó violentamente de la isla de Ellesmere, en el Ártico de Canadá, constataron investigadores de ese país, que ven en este fenómeno otro síntoma del calentamiento del planeta.
La masa de hielo de una superficie de 66 km2 se desprendió de un solo golpe de la isla de Ellesmere, enorme banda de tierra situada en el Ártico canadiense y vecina de Groenlandia.
El fenómeno, que se produjo en agosto de 2005, emitió tal energía que fue detectado por sensores sismológicos situados a 250 kilómetros de distancia. Pero nadie pudo identificar entonces lo que había pasado realmente.
El servicio canadiense de hielos entró entonces en contacto con el geógrafo Luke Copland de la Universidad de Ottawa, que reconstruyó la cadena de acontecimientos combinando los datos sísmicos e imágenes satelitales brindadas por Canadá y Estados Unidos.
"Se trata de la mayor pérdida en 25 años, pero ocurre tras varias pérdidas durante el siglo pasado", declaró hoy, precisando que la capa de hielo se redujo 90% desde el descubrimiento de esta zona en 1906, durante una expedición hacia el Polo Norte.
"Esto se produjo de manera súbita, en una hora. En el pasado, observábamos pérdidas progresivas de cubierta helada, día a día, pero hoy parece que cuando se llega a cierto punto, una plataforma de hielo puede separarse de un solo golpe", precisó.
Increíble
Tras el descubrimiento, el biólogo Warwick Vincent, de la Universidad Laval de Québec viajó a las aguas heladas del Ártico para observar la "nueva isla".
"Es realmente increíble", declaró al diario National Post.
"La gente habla de animales amenazados. Aquí se trata de paisajes amenazados, y los estamos perdiendo", añadió el investigador, que afirma que nunca vio algo de este tipo en la última década.
"Esta plataforma de Ellesmere albergaba ecosistemas únicos en el planeta, son lagos de agua dulce que se desarrollaban sobre y debajo de la capa de hielo", explicó Louis Fortier, director científico de ArcticNet, red canadiense de investigación en el Ártico.
"La disminución de la capa de hielo sobre la isla de Ellesmere se produce desde hace 12.000 años, pero esto parece haberse acelerado durante los últimos años, lo que es otro indicio entre muchos otros del recalentamiento del conjunto de la superficie helada ártica", constató.
La formación súbita de una "nueva isla" en el Ártico "es un síntoma entre un conjunto de síntomas del recalentamiento climático; el más importante es evidentemente la impresionante reducción de la extensión y el espesor del banco de hielo Ártico", estimó Fortier.
En un artículo publicado en diciembre, investigadores estadounidenses y canadienses afirman que en 2040 solo una pequeña porción del hielo permanente del Ártico se mantendrá en la costa norte de Groenlandia y Canadá durante el verano, abriendo así un corredor marítimo que reducirá el trayecto entre Europa y Asia.