MANAGUA.- El dirigente sandinista Daniel Ortega, ex jefe guerrillero, asumirá hoy la Presidencia de Nicaragua, gestión en la que deberá enfrentar la pobreza endémica del país y durante la cual se propone estar cerca de gobiernos de izquierda como los de Cuba y Venezuela, pero a la vez mantener relaciones "respetuosas" con Estados Unidos.
Ortega, de 61 años, inmediatamente después de asumir planea firmar un gran acuerdo económico con su colega venezolano, Hugo Chávez.
Esto, pese a que el lunes conversó con el jefe de la Casa Blanca, George W. Bush, quien prometió ayudarlo a combatir la pobreza, que afecta al 70% de la población nicaragüense.
El ex jefe guerrillero llegará a la Presidencia después de 16 años y tres intentos fallidos, tras los cuales se alejó del ideario revolucionario que lo ubicó como uno de los enemigos principales de Estados Unidos y matizó su discurso con apelaciones a la paz y la reconciliación, y con aproximaciones a la Iglesia Católica.
Encuestas recientes muestran que el 67% de los nicaragenses tiene esperanzas de que la gestión de Ortega dé soluciones al país, en especial respecto de sus problemas más dramáticos, como el hambre y el desempleo y subempleo, que afectan a 50% de la población económicamente activa.