CARACAS.- El Presidente venezolano, Hugo Chávez, arremetió hoy contra la Iglesia Católica después de que el titular de la Conferencia Episcopal venezolana, Ubaldo Santana, le pidió que precise si el socialismo que se propone instaurar ofrecerá "las más amplias libertades" a la población.
"Les recomiendo a los obispos que lean a Marx, a Lenin, que vayan a buscar la Biblia para que vean el socialismo en sus líneas, en el viejo y nuevo testamento, en el sermón de la montaña. ¿Qué yo le vaya a explicar a los obispos qué es el socialismo? No tengo nada qué explicarles señores obispos, bastante se supone que ustedes han estudiado y, si no lo han hecho, estúdienlo", contestó Hugo Chávez.
El Presidente venezolano fustigó especialmente al cardenal venezolano Jorge Urosa Savino y al obispo de Coro, Roberto Lucker, a quien llamó "oligarca" y le vaticinó que se irá "al infierno".
El Mandatario, en un discurso posterior a su juramento en el palacio legislativo, dijo que hay quienes "pretenden bajo chantaje y presión, utilizando instituciones como mampara, a través de personalidades incluso", desconocer las potestades del Estado.
"Por eso es que decía señor cardenal (Urosa Savino, presente en la ceremonia), con todo mi respeto, que no puedo entender la posición de la Iglesia Católica o al menos de la jerarquía. El Estado respeta a la Iglesia, entonces la Iglesia debe respetar al Estado", dijo.
"Yo le ruego al señor cardenal que ocupe su puesto; zapatero a su zapato, aquí no valdrán amenazas ni manipulaciones ni intentos de éstas", agregó. Chávez replicó así el reclamo reciente de la Iglesia Católica al gobierno para que "reconsidere" su decisión de no renovar la concesión a la televisora RCTV.
"Yo no quisiera volver a los tiempos de la confrontación con los obispos venezolanos, pero no es mi elección, es de los obispos venezolanos. Yo estaré aquí con mi fuego, defendiendo la soberanía del Estado, los derechos del Estado. Son inalienables, insustituibles", indicó Chávez.
Preocupación de la Iglesia
La Iglesia, a través del titular de la Conferencia Episcopal, monseñor Ubaldo Santana, pidió al Presidente informar qué "implicaciones políticas, económicas y sociales" tendrá en ese país sus planes de construir un sistema socialista y si se ofrecerán "las más amplias libertades".
"Deseamos que ese socialismo que se plantea sea plenamente democrático, que no se vaya a emparentar con socialismos del siglo pasado que causaron tanto dolor, muerte y miseria en los países de la Europa del este", dijo el también arzobispo de Maracaibo.
Santana dijo que el Episcopado está dispuesto a participar en las discusiones para diseñar ese modelo, porque "a la Iglesia le ha tocado vivir en regímenes socialistas de distinta índole y puede aportar su experiencia". "Tenemos autoridad moral, experiencia y suficiente doctrina para contribuir a que sea un sistema que redima a los pobres, traiga justicia y fortalezca la vida en libertad de todos los venezolanos", indicó.
La relación entre el gobierno de Chávez y la Iglesia pasó por varios momentos de confrontación desde la asunción del Presidente en 1999.