TIJUANA, México.- El Ejército mexicano devolvió hoy a la Policía Municipal de Tijuana, al noroeste del país, 2.130 armas de fuego que le había confiscado el pasado 4 enero para investigar si alguna había sido utilizada para cometer delitos.
Durante la entrega del armamento, el Secretario de Seguridad Pública de Tijuana, Luis Javier Algorri, demandó al fiscal general de la República, Eduardo Medina Mora, una aclaración pública para "desagraviar" a la policía local y un informe sobre el resultado de la revisión de las armas.
El desarme había provocado el descontento de los policías, quienes protagonizaron varias manifestaciones para exigir al Gobierno federal que demostrara sus presuntos vínculos con el crimen organizado.
Algorri explicó que el anunció de la devolución se produjo el viernes en la noche, pero que no se entregaron a los policías hasta verificar primero que se trata de las mismas que el Ejército se llevó hace 23 días.
El funcionario sostuvo también que espera que las armas de otras instituciones policiales del país, tanto estatales como federales, sean revisadas del mismo modo.