BEIRUT.- El jefe del grupo chiita libanés Hezbolá, Hasan Nasralá, aseguró hoy que el destino de Israel es su "desaparición" y que lo que sucede en la región es un "complot norteamericano para castigar a los movimientos de resistencia".
"El futuro de Israel es la muerte y la desaparición", afirmó Nasralá antes decenas de miles de sus seguidores en los barrios del sur beirutí, donde conmemoraron la muerte violenta de Husein, el tercer imán del chiísmo, muerto en el año 680 en la llamada "Batalla de Kerbala" contra las huestes de un califa omeya.
Ante la muchedumbre extasiada, Nasralá aseguró que la guerra israelí ocurrida entre el 12 de julio y el 14 de agosto pasado fue "la mayor desde la creación de Israel", y equivale en su grandeza a la batalla de Kerbala.
"Han demostrado que son una nación que rechaza la humillación. La Resistencia será siempre nuestra Kerbala y nuestra esperanza", proclamó.
Hezbolá resistió durante 34 días la ofensiva israelí, que causó más de un millar de muertos, unos 5.000 heridos y cuantiosos daños materiales, avaluados en varios millones de dólares.
Aseguró que los israelíes temían la Resistencia y dio como ejemplo la declaración del ex jefe de las Fuerzas Armadas israelíes, Dan Halutz, quien, según la versión de Nasrala, declaró que "no había atacado por tierra porque no tenía confianza en la capacidad del Ejército israelí de vencer a Hezbolá".
El líder del movimiento chiita libanés volvió a culpar al Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y a la secretaria de Estado norteamericana, Condoleece Rice, de "haber ordenado" la guerra contra Líbano, por lo que "deben ser castigados".
Nasralá reiteró que el plan norteamericano consistía en "provocar una guerra civil para vengarse de las operaciones de la resistencia en Irak, Palestina y Líbano".
"Estamos en una situación peligrosa en Líbano... El nuevo desafío es no caer en la guerra civil o en la guerra de sunitas y chiitas. El mensaje más importante es que la Resistencia se armará de paciencia y no se dejará llevar a un conflicto interior", recordó.
Nasralá volvió a llamar a la "formación de un Gobierno de unidad nacional para salir de la crisis política, social, económica y financiera" que atraviesa el país.
También instó a la justicia a "cumplir con su deber, juzgar a los que utilizaron las armas", durante los disturbios del martes y jueves pasado tras una huelga general y un incidente en una universidad de Beirut que se extendió a varios sectores.
En caso de que la justicia no castigue a los responsables -advirtió- "llevaremos al país a una guerra civil".