WASHINGTON.- Los equipos de rescate reanudaron hoy sus operaciones en el estado norteamericano de Florida, un día después de que varios tornados causaran al menos veinte muertes y grandes destrozos materiales.
Los tornados asolaron los condados de Seminole, Sumter, Lake y Volusia, en el centro del Estado, donde destruyeron casas móviles y negocios, derribaron árboles y líneas telefónicas y dejaron sin electricidad el viernes a unas 20.000 personas.
Unos 1.500 hogares y negocios permanecían hoy sin electricidad en los condados afectados, declaró a la prensa Buddy Eller, portavoz de Progress Energy Florida, compañía que distribuye energía a unos 1,7 millones de clientes.
En cuanto a los daños, los datos provisionales apuntan a más de 1.500 edificios destruidos en Lake y Sumter y unos cien en Volusia.
Los tornados arrasaron comunidades de casas móviles durante la madrugada, por lo que muchas personas murieron en sus propias camas.
Los responsables de las operaciones de rescate destacaron que determinar el número exacto de víctimas podría llevar días y que la prioridad ahora es encontrar a los supervivientes que quedaron atrapados bajo los escombros.
Está previsto que el director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), David Paulison, visite hoy la zona afectada por la tragedia, informó la cadena CNN.
Entre tanto, la Guardia Nacional acudió en ayuda de los afectados y repartió hoy mantas, agua, comida y enseres básicos a los desplazados que durmieron en albergues.
El Gobernador de Florida, Charlie Crist, quien declaró el viernes el estado de emergencia, pidió al Presidente de EE.UU., George W. Bush, que decrete el Estado zona de desastre.
Crist volvió a visitar hoy las áreas afectadas alrededor de Lady Lake, a unos 80 kilómetros al noroeste de Orlando, donde se ha confirmado la muerte de siete personas.