PARIS.- La primera dama argentina y senadora Cristina Fernández de Kirchner se reunió el lunes durante media hora con la política más popular de Francia, la candidata socialista a las presidenciales Ségolène Royal, en el primero de una serie de encuentros previstos hasta el jueves en París.
"Fue un encuentro privado en el que participó únicamente Ségolène Royal y la delegación argentina encabezada por la señora Kirchner. No tenemos ningún detalle sobre el contenido de la discusión", explicaron a la AFP los portavoces de Royal.
En Argentina, tampoco se filtró ninguna información sobre lo hablado en esta reunión, en la que estuvieron también presentes el ministro argentino de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana, y el embajador argentino en Francia, Eric Calcagno.
Royal, elegida candidata en noviembre, intenta representar una bocanada de aire fresco en el socialismo francés, dividido y algo oxidado desde las elecciones presidenciales de 2002, donde consiguió una flagrante derrota en la primera vuelta.
El encuentro entre las dos mujeres es simbólico ya que la primera dama argentina desea con este viaje a Francia dar un primer empujón a su reputación internacional ante la posibilidad de que decida ser candidata para suceder a su marido en las próximas elecciones de octubre.
Posteriormente, Cristina Fernández almorzó con el ministro de Cultura, Renaud Donnedieu de Vabres, en la sede de este ministerio, acompañada del embajador argentino ante la UNESCO, Miguel Angel Estrella.
Además, la senadora desea reunirse con el candidato de la derecha en las presidenciales francesas de abril y mayo, Nicolas Sarkozy, aunque el encuentro "tendrá lugar miércoles o jueves" y está todavía sin confirmar, según los miembros de la delegación de Kirchner.
Cristina Fernández de Kirchner se reunirá el lunes por la tarde con el primer ministro, Dominique de Villepin, un gran amante de América Latina que vivió parte de su vida en Venezuela.
Con el Jefe de Gobierno conversará sin duda del caso del ex capitán de fragata Alfredo Astiz, condenado en rebeldía a cadena perpetua en Francia en 1990, que acusó en estos días a un ex agente francés de participar en los crímenes que se le reprochan.
Además, la primera dama argentina firmará el martes la Convención internacional contra las desapariciones forzadas, un texto en el que su país ha impulsado desde hace más de dos décadas.
Pese a la enorme cantidad de actividades de la senadora argentina, tener detalles concretos sobre su agenda o el contenido de sus entrevistas es prácticamente misión imposible gracias a un total hermetismo de la delegación enviada por Buenos Aires y de la embajada del país sudamericano en París.