RIO DE JANEIRO.- Un niño de seis años murió luego de que el auto en el que viajaba fuera asaltado y los ladrones huyeran con el menor colgado fuera del vehículo sujetado al cinturón de seguridad, informó hoy la Policía, que anunció el arresto de tres sospechosos.
Según se informó, tres asaltantes detuvieron el auto en el que viajaba el niño, su hermana y su madre. Luego les hicieron bajar, pero cuando la mujer intentaba sacar al pequeño del asiento trasero, un delincuente tomó el volante y arrancó a toda velocidad antes de que el niño pudiese salir del vehículo.
El niño, que quedó sujeto al cinturón de seguridad, fue arrastrado unos siete kilómetros por cuatro barrios en una carrera que duró unos 15 minutos. Cuando detuvieron el auto, el niño ya estaba muerto y los asaltantes huyeron por unas escalinatas en calles de un barrio popular.
"Cuando vimos que era un niño que estaba siendo arrastrado, nos espantamos y gritamos: 'paren, paren’'. No pararon y luego no los vimos mas", dijo un testigo a la cadena de TV O'Globo.
El crimen provocó condena de las autoridades y los medios de prensa, pero además la conmoción de la población de Rio, que sufre a diario con la extendida violencia criminal en todo el área urbana y metropolitana.
La Policía Militar (PM) anunció esta tarde que en una operación desplegada por tres reparticiones y un batallón detuvieron a tres jóvenes -de 19, 18 y 17 años- sospechosos de haber participado en el asalto. Se indicó que los dos últimos confesaron el crimen.
Paralelamente, en el cementerio de Jardim da Saudade, en Sulacap, los familiares del niño sepultaban el cuerpo con pleno desconsuelo y con llantos generalizados: "Es una barbarie, no puede ser, destruyeron mi vida y mi familia", dijo la madre bañada en lágrimas.
Al entierro asistieron el Secretario de Seguridad Pública de Rio, José Beltrame, y el comandante general de la PM, Ubiratan Angelo, quienes dieron orden expresa de resolver el bárbaro crimen y lamentaron "la banalización de la vida".