Científicos descubren tejido que serviría como indicador de maldad en un tumor

GINEBRA.- Un grupo de investigadores de la universidad suiza de Lausanne dieron a conocer un estudio que indica que un tejido que recubre los órganos, llamado estroma, podría mostrar el grado de maldad de los tumores cancerígenos, publicó hoy el diario Le Temps.

Según ese estudio, el conocimiento permitiría pronosticar mejor la evolución del cáncer y proporcionar un tratamiento más adecuado a los pacientes.

"El descubrimiento es crucial no sólo porque permitirá pronosticar la evolución tumoral, sino que también ayudará a desarrollar nuevos medicamentos contra el crecimiento del tumor y con menores efectos secundarios", destacó el director del Instituto Suizo de Investigaciones Experimentales sobre Cáncer (Isrec), Michel Aguet.

Los investigadores de la universidad de Lausanne decidieron analizar de forma específica el estroma, una membrana formada por componentes fibrilares y sustancia fundamental, pues algunos estudios anteriores indicaban una posible relación entre ese tejido y la evolución tumoral.

Los investigadores trabajaron con ratones que padecían un cáncer de próstata similar al humano, y tras diseccionar muestras con láser para aislar las células individualmente, estudiaron el ADN de las células del estroma y su reacción ante un tumor.

El estudio, publicado recientemente en la revista científica "PLoS One", constata que, en el cáncer de próstata y de mama los tejidos que rodean el tumor contienen una marca genética que muestra su grado de perversidad.

"La evolución de un tumor en un órgano depende de las células cancerígenas, pero ahora hemos constatado que también depende del estroma, aunque falta determinar en qué proporción,” señaló Ivan Stamenkovic, director del departamento de patologías experimentales de ese centro universitario.

Stamenkovic, que también dirige el hospital universitario de la ciudad, explicó que la importancia del descubrimiento radica en que "la expresión genética del estroma puede constituir una marca característica del tumor, lo que permitiría determinar mejor la evolución del cáncer".

Los científicos han advertido también de que, si bien son optimistas, el análisis genético del estroma no se empezará a aplicar hasta dentro de cinco o diez años.