MÚNICH.- Unas tres mil personas se manifestaron hoy por el centro de Múnich, para protestar contra la 43° Conferencia de Seguridad que se celebra en la capital bávara y a la que asisten, entre otros, la canciller federal, Angela Merkel, y el presidente ruso, Vladimir Putin.
Los participantes en la marcha no pudieron, sin embargo, acercarse lo mas mínimo al céntrico hotel donde se debatía sobre política de seguridad y defensa mundial, que se encuentra herméticamente acordonado y protegido por mas de 3.500 policías.
Aunque no se produjeron incidentes de gravedad, los agentes del orden detuvieron provisionalmente a 17 personas, en su mayoría por resistencia a la autoridad o mostrar actitudes violentas.
El único incidente relevante se produjo con motivo del registro de un autobús con manifestantes procedentes del estado de Baden-Württemberg, cinco de cuyos ocupantes fueron detenidos por tratar de impedir el control del vehículo.
Las críticas de los manifestantes se dirigieron en esta edición contra la reciente decisión del Gobierno germano de enviar media docena de cazabombarderos de reconocimiento germanos Tornado a Afganistán, con el fin de apoyar a las tropas aliadas que operan en el sur del país contra la guerrilla talibán.
"Alimentar a la gente es más barato que asesinarla" o "Los amigos de la guerra no quieren la paz", son algunos de los textos de las pancartas que portaban los manifestantes que marcharon por el centro de Múnich.