El militar relevará al general George Casey, y deberá hacer frente a tiempos que se avisoran difíciles.
EFEBAGDAD.- El general David Petraeus, que hoy tomó el mando de la fuerza multinacional en Irak, apeló en el primer mensaje a sus militares a que trabajen "codo a codo" con los iraquíes, para acabar con la violencia en ese país.
"La guerra entrará pronto en su quinto año. Se acerca un momento decisivo. Codo a codo con nuestros camaradas iraquíes llevaremos una campaña crucial para mejorar la seguridad de los iraquíes", dijo Petraeus en su discurso a la tropa, que también fue distribuido a la prensa.
El general Petraeus repitió, como ha hecho desde que se conoció en enero que relevaría al general George Casey al frente de la fuerza multinacional, que esperan tiempos difíciles en los próximos meses, pero que la situación no es desesperada.
De todas formas, Petraeus recordó que "al final serán los propios iraquíes quienes decidirán el resultado de esta lucha", y aseguró que el deber de la fuerza multinacional es "darles el tiempo necesario para salvar su país".
Petraeus dirigirá a los 132.000 soldados estadounidenses, más los 21.500 prometidos por el presidente norteamericano, George W.Bush, como refuerzo para estabilizar la situación en Irak. Estos soldados de refuerzo deberán participar en los próximos días y semanas, junto a 85.000 policías y soldados iraquíes, en el ambicioso plan de seguridad del gobierno iraquí para devolver la seguridad a Bagdad, que lleva un año sumida en episodios casi diarios de violencia sectaria.
Petraeus ya avisó de la importancia de ganar "las mentes y los corazones" de los iraquíes en el manual del que es coautor, sobre cómo el Ejército de EE.UU. debe combatir a la insurgencia.
A esta cooperación con los iraquíes se refirió hoy ampliamente en su discurso, en el que también alertó sobre el riesgo de minusvalorar al enemigo. "Junto a nuestros compañeros iraquíes, debemos derrotar a quienes se oponen al nuevo Irak. No podemos permitir que los asesinos de masas tomen la iniciativa", agregó Petraeus.