SYDNEY.- Un albañil cazó con sus manos un tiburón de 1,3 metros de largo frente a una playa australiana, y reconoció el viernes que lo intentó únicamente por estar ebrio tras haber consumido numerosos tragos de vodka.
Bricklayer Phillip Kerkhof estaba pescando el lunes por la noche calamares en una costanera en Louth Bay, una aldea del estado meridional australiano de Eyre Peninsula, cuando avistó al tiburón en aguas poco profundas, según la Australian Broadcasting Corporation.
Sin pensarlo, "me lancé tras él, finalmente pude agarrarlo y lo atrapé", contó Kerkhof. "Se dedicó a coletear en el agua ... se volvió e intentó morderme y pensé 'es increíble lo que pueden hacer unas copas de vodka'", comentó posteriormente Kerkhof.
"Cuando se me pasó la borrachera lo medité y reconocí que 'soy un idiota por haberlo hecho'".
Cuando lo alzaba a la costanera, el tiburón mordió y desgarró parte de los pantalones de Kerkhof, pero él sólo sufrió un ligero rasguño.
Kerkhof contó que almorzó ya en dos ocasiones la carne del tiburón y piensa usar el resto en un asado este fin de semana que dará a sus amigos de la aldea.
La carne de su presa "es hermosa — de la misma calidad que en un restaurante", afirmó.
En las aguas australianas pululan muchos tipos de tiburones, y anualmente ocurren una media de 15 ataques de ellos, con un muerto por año.
El mes pasado, un buceador que pescaba abulones pudo escapar tras ser casi tragado, con la cabeza primero, por un gran tiburón frente a la costa del estado de Nueva Gales del Sur.