CIUDAD DEL VATICANO.- Un documento de hace 450 años ha ofrecido pruebas de que Miguel Angel tenía un cuarto privado en la Basílica de San Pedro mientras trabajaba como jefe de arquitectos del Papa, dijeron expertos del Vaticano.
Al revisar los archivos para una exhibición del 500 aniversario de la basílica, los investigadores de la Fabbrica di San Pietro - la oficina donde están todos los documentos relacionados con la basílica- se encontraron con el recibo del dinero que se le pagó a una persona para que hiciera una llave para un cofre "en el cuarto en donde el maestro Miguel Angel descansa en (la basílica) San Pedro".
El pintor y escultor del Renacimiento, cuyos frescos adornan el techo de la capilla Sixtina, estuvo a cargo de la restauración de la basílica de San Pedro durante el pontificado de Pablo III, en 1546.
Se mantuvo en ese puesto hasta que falleció, en 1564. Su mayor contribución a la basílica fue la cúpula central, una obra arquitectónica reconocida internacionalmente.
"Ahora sabemos que Miguel Angel sin dudas tenía un espacio privado en la basílica", expresó María Cristina Carlo-Stella, directora de la Fabbrica. "El próximo paso es identificarlo", agregó.
El documento escrito con tinta apareció en un libro que detallaba los gastos de la Fabbrica entre 1556 y 1558, y se refiere al pago de 10 escudos al herrero que hizo la llave, pero no ofrece detalles sobre el cofre o la ubicación del cuarto.
Las autoridades del Vaticano reportaron el descubrimiento durante la actual exhibición, titulada "Petrus Eni" ("Pedro está aquí"). El volumen, sin embargo, no fue exhibido.