WASHINGTON.- La Casa Blanca defendió este domingo el acuerdo nuclear con Corea del Norte ante críticas de que no fue lo suficientemente duro y dijo que su éxito depende del compromiso de Pyongyang.
Es el "primer paso en una larga serie que incluye la renuncia nuclear total tanto al armamento como a las plantas dentro de Corea del Norte", dijo el portavoz de la Casa Blanca Tony Snow en una entrevista con la cadena de televisión NBC.
"Si piensan recibir los beneficios en el futuro, incluyendo hasta un millón de toneladas de crudo, tienen que cumplir con su parte", agregó.
Bajo el acuerdo alcanzado el martes pasado en las conversaciones multilaterales de Pekín, Corea del Norte tiene 60 días para apagar su reactor y permitir el regreso de los inspectores de Naciones Unidas.
A cambio, el régimen hambriento de energía recibirá una primera entrega de 50.000 toneladas de diesel -parte de un millón de toneladas- además de garantías diplomáticas, de seguridad y otro tipo si renuncia definitivamente a su programa nuclear.
"No le regalamos petróleo. Tienen que rendir cuentas a los surcoreanos, a los chinos, a los rusos", agregó Snow.
"De pronto tienen varios niveles de responsabilidad... y no tendrán beneficios hasta que tomen medidas".
El senador estadounidense Carl Levin, presidente del comité del Senado para los servicios armados, dijo que el acuerdo pone a Washington en el rumbo correcto respecto a la política nuclear de Pyongyang, luego de que el Presidente George W. Bush diera "dos pasos atrás" al asumir el cargo.
"Estamos más o menos en donde empezamos, pero falta mucho camino por recorrer", dijo Levin.