KIGALI.- Ruanda soltó hoy a más de 8.000 personas que estaban en prisión por de su supuesta participación en el genocidio de 1994 a causa de la superpoblación de las cárceles.
Entre los liberados no se encuentra ningún cabecilla responsable de la matanza, aseguraron las autoridades ruandesas.
El Presidente del país, Paul Kagame, promulgó una amnistía en 2003 y desde entonces más de 60.000 presos fueron puestos en libertad. Los afectados tienen que pasar dos meses en centros de rehabilitación antes de poder ir con sus familias. Muchos de ellos estaban en prisión desde hacía más de diez años.
Como el sistema judicial estaba absolutamente sobrecargado por el alto número de prisioneros, decenas de miles de supuestos participantes en el genocidio tuvieron que rendir cuentas ante tribunales aldeanos tradicionales.
Para los instigadores del genocidio, practicado principalmente por parte de hutus contra tutsis y en el que fueron asesinadas unas 800.000 personas, existe un tribunal de Naciones Unidas en la ciudad tanzana de Arusha.