Británicos rechazan plan de Blair para cobrar peaje en carreteras

LONDRES.- Casi un millón ochocientos mil británicos han firmado una petición popular contra el plan del Gobierno laborista de aplicar un sistema de control de los viajes por carretera para cobrar a los automovilistas por kilometraje.

El Primer Ministro británico, Tony Blair, ha decidido enviar un mensaje electrónico a todos y cada uno de los signatarios explicándoles que no se trata de un impuesto clandestino ni de crear una sociedad de control total del individuo “a lo Gran Hermano”.

Según Blair, “está demostrado que mejorar el transporte público y atacar los cuellos de botella que se forman no bastan para evitar que siga agravándose el problema de congestión” del tráfico.

Las únicas opciones son, afirma el líder laborista, construir nuevas carreteras, ampliar las ya existentes o introducir un sistema de cobro por kilómetros recorridos.

En vista de la fuerte oposición popular, Blair explica a quienes se oponen a esta última opción que no se ha tomado aún ninguna decisión al respecto, pero agrega que dejar que continúe aumentando la congestión “sería malo para las empresas, para los individuos y para el medio ambiente.

”No hacer nada tendría un costo económico suplementario que para el año 2025 equivaldría a 33.000 millones de euros en concepto de tiempo perdido, explica el líder laborista.

Un 55 por ciento de los británicos se opone a un sistema de cobro por kilometraje, según un sondeo llevado a cabo por la emisora BBC.

Sin embargo, un 55 por ciento de los interrogados explica que estaría dispuesto a cambiar de opinión y a apoyar un sistema de ese tipo si el dinero que se sacase de su aplicación se destinase a mejorar los transportes públicos.

Según el semanario “The Economist,” la fuerte oposición popular a un mecanismo de ese tipo significa no sólo que muchos británicos se niegan a pagar más por utilizar el coche, sino también que no quieren tener la sensación de que el Gobierno los está espiando continuamente.