Gobierno ruso preocupado por brusca baja de las temperaturas

MOSCÚ.- El Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia advirtió hoy de que en algunas regiones del país se pueden producir averías a consecuencia de la brusca caída de las temperaturas, que pueden llegar en Siberia hasta los 52 grados bajo cero.

A partir de hoy y durante los próximos días, en las regiones siberianas de Krasnoyarsk, Taimir y Evenki las temperaturas descenderán desde los 45 grados bajo cero hasta los 52 bajo cero, por lo que las autoridades locales deben reforzar las medidas de prevención, indicó un comunicado de esa cartera, citado por la agencia Interfax.

En las regiones de Novosibirsk, Tomsk y el Territorio de Altai, en la parte occidental de Siberia, las temperaturas pueden bajar hasta los 42 grados bajo cero por la noche, y en Irkutsk, la región más extensa de Rusia, hasta 48 bajo cero.

Las regiones de Kursk, Lipetsk y Orlov, en el centro de Rusia, también son zona de riesgo, porque las temperaturas bajarán hasta los 26 grados bajo cero, lo que supone un descenso promedio de las temperaturas de más de doce grados.

El Ministerio de Emergencia recomendó a las autoridades de esas regiones reforzar las medidas para garantizar el funcionamiento de los servicios básicos, (agua potable, electricidad y calefacción), la asistencia médica y el suministro de alimentos para la población en condiciones extremas.

También aconsejó implantar un régimen de alerta máxima en las centrales eléctricas y las plantas de calefacción, que deberán operar a su potencia máxima para cubrir el consumo de energía eléctrica y elevar la temperatura en los sistemas de calefacción centralizada de las ciudades.

Las brigadas de reparación también deben estar en régimen de guardia para afrontar posibles rupturas de tuberías de agua potable, agua caliente y radiadores de calefacción, averías muy frecuentes cuando la temperatura cae por debajo de los 35 grados bajo cero.

Al mismo tiempo, Emergencia advirtió del incremento del riesgo de incendios, en su mayoría producidos por calentadores eléctricos que la población utiliza para combatir el frío.

También en estado alerta máxima deben ser puestos los bomberos, el servicio de ambulancias, las brigadas de socorristas, los hospitales y los centros de acogida para vagabundos.