TEL AVIV.- El riesgo de que estalle una nueva guerra en Medio Oriente en 2007 es escaso, pero tampoco existen buenas perspectivas de que se reavive el proceso de paz en la región, según el informe anual de inteligencia de Israel, cuyo contenido fue revelado parcialmente hoy por medios israelíes.
Aunque el informe, que será presentado el domingo al gabinete israelí, no considera probable que estalle una guerra en 2007, tampoco en el frente sirio, el documento advierte contra el peligro que supone el incremento del arsenal sirio.
El informe, elaborado por el servicio de inteligencia Mossad, la agencia secreta interna Shin Bet y el Consejo de Seguridad Nacional israelí, entre otros organismos, también advierte del rearme del movimiento chiita libanés Hezbolá, que secuestró el pasado 12 de julio a dos soldados israelíes, acción que dio origen a una guerra con Israel que se prolongó durante más de un mes.
Como motivo para rebajar las perspectivas de una revitalización del proceso de paz, el informa señala que no es probable que el nuevo gobierno de unidad nacional palestino, que estará integrado por el movimiento radical islámico Hamas y el partido Al Fatah, acepte las demandas de la comunidad internacional de un reconocimiento del Estado de Israel, la renuncia a la violencia y la adhesión a los acuerdos ya suscritos entre Israel y los palestinos.
El informe tampoco prevé que terminen los enfrentamientos entre las diversas facciones palestinas.