MANAGUA.- Dos organizaciones de derechos humanos manifestaron su preocupación por el hacinamiento que existe en las cárceles de Nicaragua y los contagios con sida debido a falta de medidas de prevención, informaron fuentes gremiales.
"Para nadie es un secreto que los reos tienen sexo dentro de las cárceles", donde se presume que más de una docena de ellos padece la mortal enfermedad, denunció la presidenta de la Asociación de Personas Conviviendo con VIH-Sida, Arelys Cano.
Según Cano, los reos con sida no reciben atención médica en los penales, en los que deberían al menos distribuir preservativos para evitar la diseminación de la enfermedad.
"Si los reos no puede usar condones se van a incrementar los casos", advirtió la dirigente gremial quien también denunció los trabas legales que ponen las autoridades para que su organización pueda visitar a los enfermos y brindar asistencia.
El reclamo fue respaldado por la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos que pidió a las autoridades carcelarias informar la situación de estos reos para que se tomen medidas de prevención.
Dos reclusos que padecían sida fallecieron en los últimos dos meses y otro está a punto de morir en el penal "Modelo", 20 kms al noreste de la capital, señalaron esta semana autoridades del Sistema Penitenciario Nacional (SPN).
El penal alberga a más de 2.000 reos, superior a la capacidad que tiene la cárcel -que consiste en varios galerones de madera vieja, donde los reclusos conviven en pequeñas celdas que carecen de servicios higiénicos, duermen en camarotes de hierro o en el piso y no tienen agua debido a problemas de abastecimiento.
El director del SPN Carlos Sobalvarro pidió recientemente al nuevo gobierno aumentar el presupuesto de las cárceles del país que cobijan a cerca de 6.000 reos que reciben menos de 50 centavos dólar diarios por persona para su alimentación.