VIENA.- La Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) ratificó por unanimidad el jueves una reducción de su ayuda técnica a Irán ante la negativa de ese país de suspender sus actividades nucleares sensibles, como le exigió el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
La junta de gobernadores de los 35 países que integran la AIEA confirmó los cortes en la ayuda técnica que comenzaron después de una resolución del Consejo de Seguridad adoptada el 23 de diciembre pasado.
"La reducción de la ayuda fue aprobada por consenso", dijo un portavoz de la agencia.
La resolución del Consejo de Seguridad había impuesto sanciones a Irán por continuar sus operaciones de enriquecimiento de uranio.
"Ninguno de estos proyectos está relacionado con el programa de enriquecimiento. El programa de enriquecimiento continuará tal como está planeado bajo las salvaguardias de la AIEA", declaró Soltanieh a los periodistas.
"Nosotros no pondremos fin a nuestras actividades nucleares, ni al enriquecimiento, no cesaremos nuestro trabajo con la AIEA y continuaremos esta tendencia y política", afirmó Soltanieh.
El uranio enriquecido puede ser utilizado como combustible para los reactores nucleares, pero en su forma altamente refinada constituye el núcleo explosivo de las bombas atómicas.
Sólo electricidad
Irán afirma que su programa es un esfuerzo pacífico para generar electricidad, pero Estados Unidos afirma que el gobierno iraní lo utiliza como una cobertura para desarrollar secretamente armas atómicas.
Las naciones desarrolladas temen que una acción con motivos políticos siente un precedente que podría perjudicar a sus proyectos de ayuda, pero respaldaron los cortes de acuerdo con la recomendación del director de la AIEA, Mohamed ElBaradei, según fuentes diplomáticas.
La embajadora cubana, Norma Estenoz, que habló en nombre del Movimiento de Países No Alineados, reiteró que los países de esta organización que forman parte de la junta reiteraban "su apoyo al establecimiento en Oriente Medio de una zona libre de toda arma de destrucción masiva".
El embajador de Alemania, Peter Gottwald, que habló en nombre de la Unión Europea, cuya presidencia rotativa ocupa actualmente su país, declaró ante la junta el miércoles que las naciones tienen claramente derecho al uso pacífico de la energía nuclear.
Sin embargo, añadió que "la Unión Europea entiende que no se suministrará ninguna ayuda a la República Islámica de Irán en las actividades delicadas de la proliferación relacionadas con el enriquecimiento, el reprocesamiento o el agua pesada, o el desarrollo de sistemas de lanzamiento de armas nucleares", de acuerdo con una copia de su discurso.
Gottwald recordó que la resolución de la ONU estipula que la ayuda sólo será destinada para comida, cuestiones médicas, agrícolas, de seguridad u otros fines humanitarios.
El embajador de Egipto, Ramzy Ezzeldin Ramzy, dijo a los periodistas que si bien la ayuda "debe ser inmune a las presiones políticas, en el caso de Irán, debido a las circunstancias especiales, creo que hay que hacer algo creativo".
De los 55 proyectos nacionales y regionales que la AIEA tiene en Irán, 22 han sido total o parcialmente congelados, afirmó Mohamed ElBaradei en un informe del 9 de febrero.
La junta de la AIEA también discutió el programa nuclear de Israel, pues la Liga Arabe manifestó "su profunda preocupación y gran inquietud" debido a los comentarios realizados en diciembre por el primer ministro israelí, Ehud Olmert, que parecían confirmar que su país tiene la bomba atómica.