TOKIO.- Las autoridades japoneses retiraron hoy la alerta de tsunami emitida para una amplia zona del centro del país, tras el fuerte terremoto de 7,1 grados de magnitud en la escala abierta de Richter que causó al menos una víctima mortal y medio centenar de heridos, informó la agencia Kyodo.
Al menos una mujer murió y 50 resultaron heridas, la mayoría de carácter leve, a causa del fuerte seísmo ocurrido a las 9.42 hora local (00.42 GMT) a 50 kilómetros de profundidad en el mar cerca del área de Hokuriku, en la provincia de Ishikawa (centro de Japón), informó la agencia local Kyodo.
El Servicio Meteorológico de Japón emitió de inmediato una alerta de tsumani para parte de la costa occidental, pero finalmente la retiró a las 11.30 hora local (2.30 GMT) tras constatar que sólo llegaron a las zonas de Noto y Kaga olas de 20 centímetros que no causaron daños.
El terremoto provocó al menos 50 heridos, la mayoría con quemaduras y cortes leves, mientras se ha informado de algunos corrimientos de tierra en la provincia de Ishikawa y parte del transporte público se vio paralizado.
Según la agencia Kyodo, la única víctima mortal reportada hasta ahora es una mujer de 52 años que quedó sepultada por un farol de piedra que se desplomó en su jardín. La mujer falleció en el hospital, donde había sido ingresada en estado grave.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, ha ordenado al Gobierno que evalúe los posibles daños causados por el terremoto y ha creado un comité de emergencia en su oficina.
El terremoto tuvo una magnitud preliminar de 7,1 grados en la escala abierta de Richter.
En la escala japonesa cerrada de siete grados, que mide las zonas más afectadas en lugar de la intensidad, el seísmo se situó en la zona alta del nivel seis, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Según las cadenas de televisión, el seísmo se sintió con fuerza aunque apenas se desplomaron edificios, ya que Japón está preparado para fuertes temblores por hallarse en una de las zonas sísmicas más activas del mundo.