PETRORIA.- Un estudio afirma que alimentar a los bebés menores de seis meses sólo con leche materna puede reducir significativamente el riesgo de transmisión de VIH de madre a hijo.
Los investigadores sudafricanos compararon a los bebes que sólo habían sido amamantados, con aquellos a los que también se les había dado alimentos sólidos y leches de fórmula y descubrieron que el amamantamiento tiene un riesgo muy bajo de transmisión y que protege contra enfermedades mortales como la diarrea y la neumonía.
Los científicos afirman que es la mejor opción para muchas mujeres de países en desarrollo.
En los países desarrollados, el riesgo de transmisión de VIH de madre a hijo se ha reducido de un 25 por ciento a un 2 por ciento gracias al uso de terapias con antiretrovirales, alimentación exclusiva con leche de fórmula y un buen apoyo médico.
Sin embargo, tales beneficios no suelen estar disponibles en el mundo en desarrollo.Allí, los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dice que las mujeres VIH positivas que puedan costear la leche de fórmula que tengan los medios para prepararla -como agua y fuego para calentarla-, deben hacerlo.
Pero los investigadores del Centro Africano para Estudios de Salud y Población de la Universidad de KwaZulu-Natal, dicen que este no es el caso de la mayoría de las mujeres en los países en desarrollo.
Por esta razón, y porque el amamantamiento exclusivo protege contra otras enfermedades, sugieren ésta como la mejor opción.
También está asociado con menos problemas de salud, como mastitis o abscesos de seno, que pueden incrementar la cantidad de VIH en la leche materna.
La investigación, patrocinada por el Wellcome Trust del Reino Unido, encontró que había un 4 por ciento de riesgo de transmisión postnatal a bebés que sólo eran amamantados entre las seis semanas y los seis meses.
Los bebés que recibían leche de fórmula o animal como complemento a la leche materna, tenían casi el doble de probabilidades de infectarse que aquellos que sólo recibían leche materna.
Mientras que a los que se les daba sólidos además de la leche materna, se les incrementaba 11 veces el riesgo de infección.
Se cree que este riesgo mayor se debe a las proteínas más grandes y complejas pueden dañar el recubrimiento del estómago, lo que permite que el virus pase por sus paredes.
En un artículo publicado en The Lancet, Wendy Holmes, del Centro para la Salud Internacional y Felicity Savage de la institución equivalente en Londres, dicen que la investigación es un "hito".
El estudio "proporciona evidencia crucial que confirma que cuando las madres VIH positivas alimentan a sus hijos sólo con leche materna, éstos tienen un bajo riesgo de infección de VIH", dicen las doctoras en su artículo, según consigna la BBC.