El fallo posiblemente despeje el camino para la liberación del ex agente de la CIA.
EFELA HABANA.- La jueza Kathleen Cardone denegó hoy la moción interpuesta por el Gobierno de Estados Unidos para que se suspendiera la liberación bajo fianza del anticastrista Luis Posada Carriles, acusado de actos terroristas por Cuba y Venezuela.
Cardone, magistrada en El Paso (Texas), dio a conocer su decisión un día después de que la Fiscalía Federal presentara el recurso judicial arguyendo que las condiciones impuestas por la jueza eran "inadecuadas" y no garantizaban que Posada Carriles se presentara ante el tribunal en mayo próximo para afrontar un juicio.
El fallo posiblemente despeje el camino para la liberación del ex agente de la CIA, acusado por Venezuela del atentado contra un avión de Cubana de Aviación en 1976, que dejó 73 personas muertas.
Si el cubano con nacionalidad venezolana es finalmente liberado, se trasladaría a Miami para residir con su esposa e hijo antes de que sea juzgado el próximo 11 de mayo en Texas.
Sin embargo, Posada Carriles también podría ser entregado a las autoridades migratorias por una orden de deportación diferida que tiene por su supuesto ingreso ilegal a Estados Unidos.
En la moción presentada el lunes, la Fiscalía Federal afirmó que "si lo liberan, desaparecerá hasta que pueda lograr su salida de Estados Unidos".
De igual forma, cuestionó los vínculos familiares del anticastrista, argumentando que, "a pesar de tener familia en Estados Unidos, no ha vivido con ésta desde los años sesenta y se ha escondido en numerosos países latinoamericanos".
Cardone concedió el viernes pasado una fianza de 350.000 dólares a Posada Carriles y le ordenó utilizar un dispositivo electrónico para su localización.
Además, le prohibió abandonar su vivienda, excepto cuando acuda a visitas con el abogado o consultas médicas previamente autorizadas por un guardián designado por el tribunal.
Posada Carriles está detenido en una prisión de Nuevo México y será juzgado por mentir en su solicitud de ciudadanía -al asegurar que entró por tierra a Estados Unidos- y por no declarar un pasaporte expedido por el gobierno de Guatemala a nombre de Manuel Enrique Castillo López.
De ser declarado culpable, el cubano podría recibir una sentencia máxima de 40 años de prisión.