LAGOS.- Por lo menos 35 fundamentalistas islámicos de Nigeria murieron hoy en una ofensiva del Ejército lanzada en la ciudad norteña de Kano, horas después de que fuera atacada una comisaría y murieran diez agentes, dijeron fuentes militares.
"La situación en la ciudad ahora es estable, mucho más que ayer", dijo a Efe el portavoz del Ejército, coronel Ayo Olaniyan, desde Abuya, la capital nigeriana.
El portavoz castrense dijo que las fuerzas del Ejército no tuvieron bajas en su ofensiva contra cerca de trescientos milicianos islámicos que habían adoptado "tácticas no convencionales" en las afueras de Kano, cuya población es mayoritariamente musulmana.
Olaniyan dijo que la ofensiva tenía como propósito sofocar las actividades de los fundamentalistas islámicos que se cree que querían vengar la muerte de un importante líder musulmán, Abdullahi Ustaq Jafar, y de dos de sus seguidores, que fueron asesinados en Kano el viernes pasado por un grupo de desconocidos.
El portavoz agregó que las investigaciones iniciales indican que los fundamentalistas islámicos procedían de Chad, aunque aún no se ha podido confirmar.
Mientras tanto, el inspector general de la Policía, Sunday Ehindero, ordenó hoy a sus hombres que tiren a matar contra cualquier persona que pretenda atacar las comisarías nigerianas.
"Vuestras comisarías son como castillos, y debéis defenderos de cualquier ataque", añadió el jefe policial en un mensaje a oficiales desde Abuya.
Tanto el ataque a la comisaría de Kano de ayer como otro anterior que se registró en la ciudad sureña de Port Harcourt casaron la muerte de diecisiete policías.
Estos brotes de violencia se producen días antes de los comicios presidenciales y legislativos, previstos para el 21 de abril.